En una entrevista exclusiva para Plan LEA, Lenin Torres, reconocido speaker, escritor, y experto en salud emocional, nos conversa sobre las heridas de la infancia y su impacto en el desarrollo emocional de los niños y adolescentes. A lo largo de esta conversación, aprenderemos cómo la sanación de estas heridas es vital para transformar la vida de los niños y adolescentes y cambiar el rumbo de nuestra sociedad.
Plan LEA: ¿Cómo las heridas de la infancia pueden manifestarse en el comportamiento de los niños en la escuela y cómo pueden los maestros identificar estas señales?
Lenin Torres: Bueno, primero que todo, es importante que los maestros entiendan que lo que sucede en las aulas es una extensión de lo que ocurre en los hogares. Si un niño está siendo agresivo, ya sea porque está haciendo bullying o porque está siendo víctima de bullying, esa conducta es un reflejo de lo que está viviendo en casa. Muchos niños que hacen bullying lo hacen porque están siendo maltratados en su hogar; y los que lo reciben, lo reciben porque también provienen de un entorno violento, aunque sea de manera pasiva. Las emociones de agresividad, tristeza y ansiedad que los niños llevan de casa se trasladan al aula, creando un ciclo de violencia que es muy difícil de romper sin intervención.
PL: En su experiencia, ¿qué heridas emocionales son las más comunes en los niños?
LT: Las dos heridas más comunes que veo son la del abandono y la del rechazo. Estas heridas tienen un impacto profundo en los niños. Cuando un niño siente que no es querido, o que ha sido dejado atrás, eso lo marca de por vida. A medida que los niños crecen, emergen otras heridas, como la humillación y la injusticia. Estas son comunes entre los 7 y 9 años, cuando los niños ya comienzan a tener una comprensión más compleja del mundo que los rodea. Si estas heridas no se abordan, pueden desencadenar problemas serios en su comportamiento y en su salud emocional a largo plazo.
PL: ¿Qué pasos pueden dar los padres para ayudar a sanar esas heridas en sus hijos?
LT: Lo primero es que los padres reconozcan que ellos también tienen heridas que sanar. No pueden ayudar a sus hijos si no se ayudan a sí mismos primero. El siguiente paso es entender que no pueden hacerlo solos. Necesitan ayuda profesional. Es crucial que busquen a un terapeuta que trabaje con temas de violencia, duelo y heridas emocionales. En segundo lugar, es fundamental que la pareja, tanto el padre como la madre, estén en sintonía. La sanación emocional es un trabajo en equipo. Si uno de los dos no se compromete, el proceso será mucho más difícil. La intervención temprana es clave. Los niños pequeños tienen una mayor capacidad para sanar que los adolescentes o adultos, porque su mente es más flexible.
PL: Muchos padres se sienten abrumados y no saben cómo enfrentar estos problemas. ¿Qué les dirías a esos padres que se sienten perdidos?
LT: Lo que les diría es que reconozcan que la sanación emocional es un proceso. No tienen que hacerlo todo a la vez, pero deben empezar. Uno de los mayores obstáculos es la falta de conciencia. Muchos padres no se dan cuenta de que están replicando patrones de conducta que aprendieron en su infancia. Este ciclo de maltrato o negligencia se transmite de generación en generación si no se interviene. Los padres tienen que educarse, leer, formarse, y lo más importante, comprometerse a sanar. Si no lo hacen, están dejando a sus hijos atrapados en un ciclo de dolor y sufrimiento.
PL: ¿Crees que los programas educativos en las escuelas pueden hacer algo para ayudar a los niños con estas heridas emocionales?
LT: Los programas contra el bullying son necesarios, pero no van a solucionar el problema en su totalidad. El bullying en la escuela es solo una manifestación de lo que ocurre en casa. Si un niño está siendo maltratado o vive en un ambiente de violencia, esa agresividad va a salir en su comportamiento en la escuela. Los programas educativos son una herramienta, pero si los padres no se involucran, si no cambian la forma en que manejan sus emociones y sus relaciones familiares, el problema persiste. La verdadera transformación empieza en el hogar, porque es allí donde los niños pasan la mayor parte de su tiempo. Las escuelas tienen un papel importante, pero es necesario que haya un trabajo conjunto con los padres, la familia, y los profesionales de la salud.
PL: Finalmente, ¿qué mensaje le darías a los padres y educadores que están luchando con estos temas?
LT: Mi mensaje es claro “el cambio comienza en casa”. Los padres tienen que ser el modelo emocional para sus hijos. Si los padres sanan, los niños sanan. Si los padres logran romper los ciclos de violencia y dolor, están ofreciendo a sus hijos un futuro mucho más saludable y lleno de oportunidades. No se trata solo de corregir conductas, sino de transformar la mentalidad, las emociones y las relaciones familiares. Y, por supuesto, si se sienten abrumados, busquen ayuda profesional. No tienen que hacerlo solos.
Acerca de Lenin Torres
Lenin Torres es un reconocido speaker, escritor y autor bestseller, con una vasta experiencia en el campo de la salud emocional y la sanación de las heridas de la infancia. A lo largo de su carrera, ha trabajado con miles de niños, adolescentes y adultos, ayudándoles a superar traumas emocionales y a recuperar su bienestar emocional. Torres ha escrito varios libros y artículos sobre el impacto de las emociones en el bienestar humano, y ha acompañado a cientos de familias en su proceso de sanación.
El 1 de noviembre de 2024, Lenin Torres estuvo en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (Unphu), en Santo Domingo, para impartir la conferencia ‘Sanando las Heridas de la Infancia’, dirigida a representantes de Apmae, la Federación y personal de la Dirección de Participación Comunitaria.