Por Amalia Incháustegui De Hernández
“La educación no cambia al mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo”. Paulo Freire
“La educación inclusiva (EI) es parte de la respuesta integral ante una emergencia y tiene como objetivo garantizar que todos los niños, niñas y adolescentes tengan acceso equitativo y continuo al aprendizaje en todos los contextos”, expresa la UNICEF.
Cuando se habla de “todos los estudiantes” y en “todos los contextos”, se plantea la necesidad de ofrecer los apoyos específicos que precisan los estudiantes con necesidades educativas especiales con y sin “discapacidad”, por lo que se hace necesario personalizar los apoyos, de lo contrario, no se logrará la meta deseada.
Según Pilar Arnaiz, quien fuese profesora de mi programa de Doctorado en Educación de la Universidad de Murcia, la educación inclusiva representa un intento por atender las dificultades de aprendizaje de cualquier alumno en el sistema educativo. Representa un medio de asegurar que los estudiantes con discapacidad tengan los mismos derechos que el resto de sus compañeros que asisten a una escuela regular. Es decir, que todos los estudiantes que sean bienvenidos y aceptados, formen parte de la vida de sus escuelas, y que sean considerados por sus profesores como un reto, no como un problema. Agrega que el concepto de inclusión trata de abordar las diferentes situaciones que llevan a la exclusión social y educativa de muchos alumnos. Por tanto, tiene que ver no sólo con los alumnos con necesidades educativas especiales, que indudablemente tienen que seguir siendo atendidos, planificada su respuesta educativa y recibir los apoyos correspondientes en las aulas regulares, sino a todos los alumnos. (Arnaiz, 2002. Coordinación educativa y cultural centroamericana. Colección Pedagógica Formación Inicial de Docentes Centroamericanos de Educación Primaria o Básica Educación Inclusiva en nuestras Aulas. Ana Lucía Ávila Durán Victoria E. Esquivel Cordero. Volumen 37. Pág.17).
Esto constituye un gran desafío para los centros educativos y los Ministerios de Educación alrededor del mundo y de toda la sociedad en su conjunto, ya que muchos recursos necesarios están fuera de las escuelas y se requiere de toda la sociedad para cambiar el paradigma y valorar la diversidad como un aspecto positivo, en vez de discriminación y exclusión.
Docentes formados para la inclusión
“Crítico no es quien quiere, sino quien puede. Para ser crítico, se requiere formación. Y si no se tiene formación, no se puede ser crítico porque no se tienen las bases, los conocimientos necesarios” Dr. Francisco García, Universidad de Murcia.
Al hablar de competencias docentes, siempre se menciona el dominio de los saberes de su área; la capacidad para desarrollar el pensamiento lógico, crítico y creativo; el dominio de la teoría y la metodología curricular para orientar acciones educativas; la capacidad para diseñar y poner en práctica estrategias de enseñanza-aprendizaje según los contextos; crear y evaluar ambientes favorables para el aprendizaje; el dominio de técnicas relacionadas con los avances de las tecnologías de la información y la comunicación; además de las competencias para la investigación y la reflexión acerca de sus práctica; planteando sus propias estrategias, procesando información y encontrando recursos para aprender. También debe ser capaz de flexibilizar el currículum para poder contextualizar y garantizar el aprendizaje de sus estudiantes. Estas características hablarían del docente como un profesional de la educación con capacidad de reflexión sobre su práctica y comprometido con el derecho a una educación de calidad para todos sus estudiantes (Calvo 2009a. páginas de Educación. versión On-line ISSN 1688-7468. Pág. Educ. vol.6 no.1 Montevideo jun. 2013 (La Formación De Docentes Para La Inclusión Educativa) Teacher Training For Inclusive Education. Gloria Calvo*)
Los docentes formados para la inclusión educativa requieren tener competencias para el trabajo en equipo, para conformar grupos multidisciplinarios, para el manejo de conflictos y la capacidad para integrar la comunidad educativa a la escuela a través de su proyecto institucional. Para ello, no sólo requiere el manejo de estrategias para el trabajo con las familias, sino saber relacionarse con las autoridades del nivel local y regional, con el fin de gestionar la viabilidad de proyectos que requieren sinergias con actores y organizaciones sociales.
En conclusión, debe tener la capacidad de convertirse en un investigador en acción, reflexionando cada sobre su accionar; siempre aprendiendo, desaprendiendo y volviendo a aprender.
Escuelas formadas para la inclusión
“Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad” – Albert Einstein, físico.
El primer paso, antes de ingresar a un estudiante a cualquier centro educativo es la entrevista con la familia y la evaluación inicial del estudiante. Luego de este momento, el centro toma la decisión de dar ingreso o no al estudiante, según las posibilidades de brindar el apoyo necesario al mismo. Lamentablemente, este es el momento en que muchas familias con hijos que poseen necesidades especiales, no son acogidas.
Los Centros Educativos deben definir y establecer procedimientos, instrumentos e instancias a través de los cuales se realice la acción evaluativa de inicio del año escolar de forma adecuada en cada nivel educativo. La llamada, evaluación diagnóstica.
Es importante observar la forma en que se comunica la información, la variedad de actividades que propone y las formas evaluativas adoptadas, poniendo especial atención a su nivel de diversificación y atención a los distintos niveles comunicativos, estilos y ritmos de aprendizaje presentes en sus estudiantes.
Cabe resaltar, que constantemente se debe estar evaluando, reflexionando, y tomando acciones de mejora.
El clima escolar que se respira en el centro educativo, es esencial para el éxito en la atención a la diversidad. Es muy importante la valoración de la calidad de las relaciones entre los docentes y sus estudiantes y entre ellos mismos. Se debe prestar atención al tipo y grado de participación que se promueve en el aula, así como a las ayudas diferenciadas que el docente les proporciona a sus estudiantes para apoyar sus procesos de aprendizaje, según sus necesidades; tomando en cuenta la realidad sociocultural y contexto familiar de cada uno de ellos. Por ejemplo, en el caso de los estudiantes no videntes, simplemente se necesita superar su discapacidad visual con los medios necesarios (braille, programas tecnológicos de lectura y escritura).
En ocasiones, se deben realizar adaptaciones de físicas de accesibilidad. Como lo expresa Aragall (2010), “hablar de accesibilidad es hablar de igualdad de oportunidades.” Al crear entornos, programas y herramientas educativas de accesibilidad universal, se hace posible que todas las personas, sin discriminación alguna, puedan acceder a una educación de calidad. Es decir, la accesibilidad se relaciona a la actitud frente a la atención a la diversidad y eliminación de barreras a través de proveer de recursos especiales, elementos personales, aspectos organizativos y presentación de la información, junto a las condiciones físicas, de iluminación, ventilación, sonoridad, distribución del espacio dentro del aula, ubicación del estudiante dentro del aula, acceso a la información y agrupamiento de todos los estudiantes según las diferentes actividades a realizar (pequeño grupo, grande grupo, individual), de manera que se sienta integrado. Los entornos accesibles facilitan el desarrollo de las competencias a lograr en cada estudiante; tomando siempre en cuenta que este logre su mayor grado de autonomía, con alegría y que las decisiones relativas a qué, cómo, cuándo enseñar y evaluar, sean dentro de un clima afectivo que favorezca, no solo su aprendizaje, sino también su estado emocional. Esto obliga a romper con el enfoque arcaico homogeneizador donde todos los estudiantes realizan la misma actividad, de la misma forma, en el mismo tiempo y con los mismos materiales.
Otro punto importante son las normas de convivencia definidas de forma participativa y respetadas por todos los miembros de la comunidad educativa, promoviendo el trabajo en equipo e integrando a las familias en el proceso educativo de sus hijos.
(Proceso de Revisión y Actualización Curricular, Viceministerio de Servicios Técnicos y Pedagógicos, Dirección de Educación Especial Orientaciones Generales para la Atención a la Diversidad Guía para la realización de Ajustes Curriculares Individualizados (ACI) Versión preliminar para revisión y retroalimentación. Equipo técnico que participó en la elaboración de este documento: Autoría Claudia Castillo De León Clara Elena Cruz Marte Cristina Amiama Espaillat).
Discapacidad y estadísticas educativas
La Orden Departamental no. 03 de 2008 que modifica las directrices nacionales para la educación inclusiva promueve la creación de un sistema de levantamiento de datos de la población que presenta NEE en coordinación con el Departamento de Estadística Educativa para poder tener un mayor conocimiento de la población y poder brindarle el apoyo que necesita.
Con relación a los estudiantes en situación de vulnerabilidad asociada a discapacidad, el país dispone de tres fuentes de información oficial sobre la población con discapacidad: el Censo Nacional de Población 2010, ENHOGAR 2013 y ENDESA 2013. De acuerdo con el Plan Estratégico 2017-2020 del MINERD, las tres fuentes no son comparables entre sí ya que utilizaron diferentes criterios para valorar la discapacidad con lo cual las estadísticas oscilan entre un 7% a 12.4% de la población.
En el país hay más de un millón de personas con discapacidad, según el Censo Nacional de 2010, y de esta cantidad el 24% es analfabeta, mientras el 16% no ha asistido a ningún centro escolar, y de los que han asistido o asisten a la escuela el 70% no avanza más allá del nivel inicial o básico, lo que demuestra que sí existen brechas de importancia en materia educativa.
“Hacer una transformación inclusiva necesita de la voluntad de todos. La discapacidad es una oportunidad de cambio”, manifestó el director del Conadis, Magino Corporán, al participar en el almuerzo del Grupo Corripio.
El país tiene entre 100 y 150 mil personas con discapacidad auditiva.
La ex-directora de Educación Especial, María Angelina Rodríguez, en 2019, destacó el aporte que hace el Minerd por una educación de calidad con el concepto de inclusión e igualdad dirigida a los estudiantes con condiciones especiales, apegada al respeto de los derechos de los niños. “Los niños no deben adaptarse a la escuela, la escuela tiene que garantizarles sus derechos y que sea accesible; eso es lo que queremos y lo que nos une. Para nosotros es fundamental que ustedes conozcan cuáles son las políticas y estrategias que vamos a llevar desde aquí y que sean parte con aportes, porque es la única forma de poder garantizar la calidad”, expresó. La funcionaria refirió que es una estrategia que toca a los Centros de Atención a la Diversidad (CAD), que en ese momento existían 13 en igual número de regionales educativas. Para ese año estaba en carpeta la apertura de 10 a nivel distrital y para el 2020 otros cinco CAD en los regionales faltantes.
Hemos tratado de tener la cantidad exacta al día de hoy de los CAD, sin éxito alguno.
Indicó que existían en ese momento, 242 Espacios de Apoyo a los Aprendizajes, una estrategia que se ofrece a aquellos estudiantes que a partir del cuarto grado de Primaria presentan un desfase curricular de dos años en lectura, escritura y matemática. La estrategia ha impactado a 1,084 centros de educación regular, apoyando a 351 planteles escolares.
El plan expuesto es el resultado de un proceso de consultas que se lleva a cabo desde el año 2017, con la sociedad civil y con las diferentes instancias del Minerd. Las metas del programa se enmarcan dentro del Plan Estratégico de Educación 2017, acorde con la Agenda 2030 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En la Mesa de Diálogo participaron representantes del Consejo Nacional de Discapacidad (CONADIS), Centro de Atención Integral para la Discapacidad,
Asociación Nacional de Sordos de la República Dominicana (ANSORDO), FUNDEINSOR, Asociación PRO Educación del Sordo, Instituto de Ayuda al Sordo, Patronato de Ciegos, Fundación Dominicana de Ciegos, Fundación Francina Hungría, Asociación Unión de Ciegos Azuanos, Asociación de Ciegos del Cibao, Centro Nacional de Recursos para la Discapacidad Visual Olga Estrella, Fundación de Autismo y Fundación Manos Unidas por el Autismo.
El 10% de la niñez y adolescencia de República Dominicana tiene alguna discapacidad en uno de los tres dominios que fueron evaluados en la encuesta Enhogar Mics 2019 realizada por la Oficina Nacional de Estadística (One), con apoyo financiero y técnico del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Tal y como señala el análisis realizado por la Oficina Nacional de Estadística (2013), ante la ausencia de registros continuos que puedan proveer información periódica sobre los diferentes aspectos de la situación de discapacidad en el país, los datos de la para el análisis de situación a nivel nacional descansan en gran parte, en el Censo Nacional y las encuestas nacionales. Esto presenta la limitante de que estas fuentes, por lo general, no se diseñan de manera específica para la medición de discapacidad.
En este sentido, partiendo de las diferentes fuentes actualmente disponibles, la prevalencia general de discapacidad en República Dominicana oscila entre un 12.29 % (Censo 2010), 4.89 % (ENDESA 2013) y la Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples (ENHOGAR) 2013 con una cifra de 7.01 %
Según los datos de la ENHOGAR 2013, un 1.82 % de niñas y adolescentes femeninas, y un 2.24 % de niños y adolescentes masculinos, entre 0 y 19 años de edad, en República Dominicana, viven con alguna discapacidad.
El 3 de diciembre del 2021, El Ministerio de Educación de la República Dominicana (MINERD), junto a otras siete instituciones, acordaron establecer una mesa de diálogo para coordinar la inclusión a nivel nacional de personas de 0 a 18 años que estén dentro y fuera del sistema educativo y presenten alguna condición de discapacidad.
El objetivo de esta mesa es recabar las informaciones que permitirán diseñar e implementar una base de datos que permita el flujo de información que sirva de apoyo para la toma de decisiones en la ampliación de cobertura de los servicios de escolarización y apoyo de esta población.
La mesa de diálogo quedó instaurada durante un acto conmemorativo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, y forman parte, además, el Consejo Nacional de la Discapacidad (CONADIS), Oficina Nacional de Estadística (ONE), Sistema Nacional de Salud (SNS), Sistema Único de Beneficiarios (SUIBEN), Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MISPAS), Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID) y las Asociaciones Sin Fines de Lucro (ASFL).
Maestros sombra, ¿dónde y cómo funcionan?
Un maestro sombra es una persona muy especial, que ayuda a la integración socioeducativa de su estudiante que tiene dificultades para trabajar por sí solo debido a alguna situación especial que presente. Deben ser profesionales que estén aptos para ejercer esta labor; con los conocimientos requeridos para favorecer el desarrollo cognitivo y social de sus estudiantes.
Entre sus principales funciones destacan:
- Apoyar al alumno en el aspecto académico y emocional.
- Promover su progreso hacia la autonomía, unido a su integración al resto de los compañeros del aula.
- Entender el proceso del alumno, según su caso individual.
- Mediar entre la familia y el centro educativo.
- Reducir todas barreras que puedan presentarse.
Lamentablemente los estudiantes del sector público que necesitan de un Maestro Sombra, están desprovistos de esta ayuda tan especial por lo que la mayoría termina desertando del sistema educativo.
Proyecto de Ley para la inclusión
La Comisión Bicameral que tuvo a su cargo el estudio del Proyecto de Ley que Regula las Políticas Públicas para la Atención, Protección e Inclusión de Personas con Trastorno de Espectro Autista (TEA), sometido para su estudio por los senadores Franklin Rodríguez de San Cristóbal y Dionis Sánchez Carrasco de Pedernales.
En el día de ayer, 30 de mayo, fue aprobado por la Cámara de Diputados, quien recibió dicho proyecto de ley, previamente aprobado por el Senado. Actualmente, reposa en las manos de la Presidencia de la República para su promulgación.
Las leyes de una nación son el reflejo del sentir de sus ciudadanos. Necesitamos leyes que reflejen una sociedad que respete la vida y el derecho a la educación de todos sus ciudadanos; una sociedad que refleje la civilización del amor.
La autora de este artículo es directora del Colegio Santa Teresita y vicepresidente de la Unión Dominicana de Instituciones Educativas Privadas (Udiep).