La adolescencia es una etapa de transición que va de la infancia a la vida adulta marcada por cambios físicos, emocionales y sociales que requiere una especial atención a la salud mental.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, los trastornos mentales representan el 16% de la carga mundial de enfermedades y lesiones en personas de entre 10 y 19 años, y se inician a los 14 años o antes; y lo peor de todo es que no se detectan, y por tanto tampoco se tratan, en la mayoría de los casos.
Esta organización destaca que la depresión es una de las principales causas de enfermedad y discapacidad en la adolescencia, mientras que el suicidio es la tercera causa de muerte entre jóvenes de 15 a 19 años.
Promover el bienestar psicológico de los adolescentes y protegerlos de experiencias adversas y factores de riesgo que puedan afectar a su capacidad para desarrollar todo su potencial es esencial para su bienestar durante esta etapa y la vida adulta.
Consejos para una buena salud mental en la adolescencia
- Convivencia familiar
Padres y madres deben permitir que ejerzan su libertad y sean ellos mismos/as quienes descubran y exploren. Aunque sin bajar la guardia, para detectar cualquier cambio de conducta, que pueda indicar algún problema.
La comunicación y las actividades familiares deben tener un peso importante. Deben saber que sus padres están ahí para ayudarles en sus problemas e inquietudes.
- Límites y libertad
En el camino hacia su propia identidad como adultos, es frecuente que los adolescentes se opongan a los padres, a los profesores, así como a otras figuras que ejercen autoridad. En este sentido, establecer limitaciones les va a ayudar a aprender cuáles son los límites.
- El respeto
El respeto por sí mismos, hacia los demás y por el medio ambiente es algo que se debe inculcar al adolescente para prevenir ciertas conductas que puedan conllevar un peligro.
- Horarios y rutinas
Mantener horarios y rutinas en la adolescencia, como horarios para las comidas, las tareas domésticas, la higiene, el tiempo de ocio o el dedicado al estudio, les ayudará a organizarse, planificarse y aprender donde están los límites.
- Las amistades en la adolescencia
Las amistades juegan un papel clave en la adolescencia. Es habitual que prefieran pasar más rato con sus amigos que con la familia.
Es importante mostrar interés por las amistades, así se aporta seguridad a los menores y se evitan situaciones de riesgo.
También lo es promover el respeto, la honestidad y la amistad, que son hábitos sociales muy buenos.
- Alimentación saludable y variada
Seguir una alimentación saludable y variada es siempre beneficioso para la salud. Adquirir buenos hábitos en la adolescencia ayuda a prevenir problemas a largo plazo y facilita la adopción de un estilo de vida saludable.
- El descanso en la adolescencia
La adolescencia es una etapa de gran desgaste físico y mental. Dormir entre 9 y 10 horas diarias es importante para un buen rendimiento académico y un mejor humor.
- Practicar actividad física
Practicar actividad física una hora diaria, aporta a los adolescentes beneficios físicos, ya que se previene la obesidad y el sedentarismo, y se toma conciencia corporal; Psicológicos, ya que se aumenta la autoestima y se disminuyen efectos como la ansiedad y la depresión, y sociales, como trabajo en equipo o responsabilidad.
- Uso responsable de las nuevas tecnologías
Educar a niños y adolescentes en un buen uso de Internet, de las redes sociales y los videojuegos es clave para hallar un equilibrio y usarlos de forma saludable.
Fuente:
https://www.teknon.es/blog/es/salud-az/9-recomendaciones-cuidado-salud-mental-adolescencia