Vida Verde. El pasado sábado, frente al bullicio del Malecón de Santo Domingo, un grupo de personas se reunió no solo para recoger basura, sino para sembrar conciencia. Con guantes, fundas y mucha voluntad, colaboradores de Listín Diario y representantes empresas aliadas se unieron a la segunda edición de “Vida Verde”, una jornada de limpieza en la playa Isla Tortuga, un rincón costero que —como tantos otros— lucha a diario contra el descuido humano.
Esta iniciativa busca promover la conciencia ambiental y el compromiso ciudadano con la protección de los recursos naturales. Durante la jornada, los participantes se unieron para recolectar desechos sólidos en una zona afectada por la contaminación, demostrando que el trabajo conjunto puede marcar la diferencia.
El evento contó con el respaldo de empresas aliadas como Lanco, DP World, Seaboard, Agua Crystal, el Ministerio de Medio Ambiente con su programa Limpieza de Playas y Ríos, Helados Holis, Gelato Gadama y L&M Tu Marquesa, que se sumaron a la causa aportando insumos, apoyo logístico y personal voluntario.
Karline Álvarez, encargada de marca de Listín Diario, lo expresó con claridad:
«Con paciencia y conciencia, cada uno de nosotros puede ser portavoz del cambio. Las playas son de todos y debemos cuidarlas como tal.» Y es que el mensaje se sintió auténtico.
DP World Dominicana, con más de tres décadas comprometida con el medio ambiente, se sumó con entusiasmo. Jarolin De los Santos, en representación de la empresa, recordó que iniciativas como estas no son gestos aislados, sino parte de una cultura que se construye con constancia.
Desde el Ministerio de Medio Ambiente, María Yepes —instructora de limpieza de playas— reforzó esta idea, explicando que su equipo trabaja a diario en la limpieza de costas como Tortuga y Güibia. Participar en actividades como “Vida Verde”, dijo, es una forma de conectar a la ciudadanía con esa labor continua.
Más allá de las fundas llenas de residuos, lo que quedó fue una experiencia compartida que demuestra que aún estamos a tiempo de transformar nuestra relación con el entorno. Que limpiar una playa no es solo una acción simbólica: es un acto de justicia hacia el planeta.
Y si algo nos recordó esta jornada es que cuidar el medio ambiente también nos pertenece.
