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La falta de sueño en los adolescentes: un problema común

Dormir es vital para personas de cualquier edad. Pero, especialmente en los adolescentes, su profundo desarrollo mental, físico, social y emocional requiere un sueño de calidad. Los adolescentes necesitan, en promedio, de 8 a 10 horas de sueño por noche. Sin embargo, la mayoría no duerme lo suficiente. La escuela, los amigos, las tareas, las actividades, internet y la televisión pueden tener mayor prioridad para un adolescente que el sueño. Sin embargo, no dormir lo suficiente (privación del sueño) puede causar graves problemas de salud y bienestar. Aquí te explicamos cómo comprender mejor las necesidades de sueño de tu hijo y qué puedes hacer para ayudarlo.

Los ritmos naturales de sueño de un adolescente

Los adolescentes tienden a trasnochar y a querer dormir hasta tarde. Pero no es que sean perezosos ni tercos. En realidad, se debe a los ritmos naturales de su cuerpo. Las sustancias químicas corporales en los adolescentes hacen que, de forma natural, quieran acostarse alrededor de la medianoche o más tarde. Estas sustancias también provocan que quieran despertarse tarde por la mañana. El inicio temprano de las clases va en contra de estos ritmos naturales. Y la presión sobre el tiempo después de la escuela les impide acostarse temprano para recuperar el sueño perdido. El resultado suele ser un adolescente con falta de sueño.

¿Por qué debería preocuparme?

Los adolescentes que no duermen lo suficiente pueden tener problemas para concentrarse en clase. Pueden tener calificaciones más bajas de las que son capaces de obtener. Una falta de sueño a largo plazo (crónica) en adolescentes también se ha relacionado con problemas de salud. Estos incluyen un mayor riesgo de sobrepeso, desarrollar diabetes o enfermedades cardíacas y contraer infecciones. Los adolescentes que están privados de sueño pueden quedarse dormidos en clase o en otros lugares inapropiados. Y para los adolescentes que conducen, tener sueño puede aumentar el riesgo de un accidente grave. Con base en datos analizados de las Encuestas nacionales y estatales sobre comportamientos de riesgo en jóvenes de 2015,5 se preguntó a los estudiantes cuánto dormían habitualmente en las noches de escuela. Se consideró que los estudiantes de 6 a 12 años que informaron dormir menos de 9 horas por noche no dormían lo suficiente. También se consideró que los adolescentes de 13 a 18 años que informaron dormir menos de 8 horas no dormían lo suficiente.

Señales de que tu adolescente necesita dormir más

¿Su hijo adolescente sufre de falta de sueño? Esté atento a las siguientes señales:

  • Somnolencia diurna.
  • Dificultad para concentrarse o recordar.
  • Irritabilidad.
  • Necesidad de cafeína u otros estimulantes para mantenerse despierto.
  • Necesidad de siestas después de la escuela.
  • Malas notas.
  • Dificultad para dormir. Esto incluye problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido.

Lo que puedes hacer

Consejos para ayudar a su hijo a dormir más y estar más alerta durante el día:

  • Anime a su hijo adolescente a dormir bien por la noche con regularidad. Intente establecer una hora fija para acostarse. Ayude a su hijo a evitar trasnochar haciendo tareas o estudiando. Si las actividades extraescolares le consumen demasiado tiempo, considere reducirlas.
  • Haga que su hijo adolescente se levante a la misma hora todas las mañanas. No le recomiende dormir hasta tarde los fines de semana para recuperar el sueño perdido. Esto perjudica más que beneficia al alterar el ritmo del sueño.
  • Limite el consumo de cafeína. No permita que su hijo consuma cafeína después del almuerzo.
  • Asegúrese de que su hijo adolescente use la cama solo para dormir. Esto significa que no la use para leer, escribir, comer, navegar por internet, ver televisión, hablar por teléfono ni jugar a videojuegos.
  • Limite el uso del teléfono inteligente, la televisión y la computadora (que pueden ser estimulantes) al menos una hora antes de acostarse. En su lugar, fomente la lectura, escuchar música tranquila, escribir en un diario u otra actividad relajante durante este tiempo.
  • Ofrézcale a su adolescente una bebida tibia sin cafeína, como leche, antes de acostarse.
  • Haz que el dormitorio sea un lugar donde sea fácil conciliar el sueño. Saca el televisor, la computadora y el teléfono del dormitorio. Asegúrate de que la habitación esté fresca, oscura y silenciosa.
  • Encienda una luz brillante en la habitación del niño por la mañana. Esta luz ayuda al cuerpo a despertarse y detiene la producción de hormonas del sueño. Pídale a su hijo que use un despertador con luz.

¿Cuándo debo llamar al médico de mi hijo?

Los siguientes pueden ser signos de un problema más grave que puede tratarse. Informe al médico de su hijo si:

  • Su hijo se queda dormido durante el día.
  • La pierna de su hijo se contrae o se mueve cuando intenta conciliar el sueño o su hijo tiene un sueño extremadamente inquieto.
  • Su hijo camina dormido.
  • Su hijo ronca fuerte.
  • Su hijo a menudo tiene problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido (insomnio).

Fuente: https://www.saintlukeskc.org/

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