Redacción Plan LEA
La violencia, ya sea de género, intrafamiliar o escolar, ha ocupado los titulares de noticias a lo largo del año 2023.
Plan LEA, como entidad comprometida con el desarrollo de la educación en República Dominicana, ha abordado esta problemática a través de reportajes durante todo el año.
La violencia de género es uno de los principales desafíos que afecta a nuestra sociedad dominicana. La violencia escolar y la violencia de género están estrechamente interconectadas, siendo prácticamente inseparables. En los centros educativos, se manifiesta la violencia de género, y a su vez, los estereotipos tradicionales de género contribuyen a minimizar, invisibilizar o justificar muchas formas de violencia escolar.
El sexismo y el machismo son factores clave que continúan perpetuando, e incluso incrementando, la violencia escolar. La violencia de género está muy presente en las escuelas. Por ejemplo, se observa la desigualdad de género reflejada en violencia verbal y física en los centros educativos. Además, es alarmante la frecuencia de casos de acoso y violencia sexual, donde las alumnas son constantemente víctimas.
Es fundamental abordar de manera integral la violencia escolar y cuestionar los estereotipos de género presentes en las estrategias de abordaje. La creencia errónea de que “los varones son violentos por naturaleza” justifica y tolera la violencia ejercida por ellos, mientras que la falsa idea de que “las mujeres provocan” justifica la violencia que ellas sufren. Estas ideas deben ser cuestionadas y desaprendidas.
La violencia escolar es un tema sumamente preocupante que requiere atención y acciones preventivas. Necesitamos una política nacional específica para mejorar la convivencia escolar, que aborde la violencia desde una perspectiva integral e intersectorial, con un enfoque en los derechos humanos. Además, es necesario incorporar la convivencia pacífica, la prevención de la violencia escolar, el desarrollo de habilidades socioemocionales, así como el enfoque de género y derechos humanos, como objetivos fundamentales en la formación inicial y continua del profesorado.
Es fundamental que los docentes tomen conciencia de esta problemática y reflexionen sobre cómo sus acciones y actitudes pueden perpetuar o erradicar la violencia de género y el machismo en los centros educativos. Debemos ser autocríticos y reconocer nuestra responsabilidad en la perpetuación de la violencia para poder ser parte de la solución.
Además, es esencial desarrollar espacios de diálogo y debate permanente con los alumnos, fomentando un ambiente seguro y respetuoso donde puedan expresar sus inquietudes y contribuir a la construcción de una cultura de paz y igualdad.
Juntos, podemos lograr un año escolar libre de violencia en todas sus formas. Es hora de actuar y promover un entorno educativo seguro, inclusivo y respetuoso para todos.
