Cuando te sientes triste, ¿cómo te sienta un abrazo sincero de alguien a quien quieres? Sanador, ¿verdad? Pues a un hijo multiplica ese efecto sanador por mil veces más, porque ese es el efecto que siente.
Si eres un adulto que en su infancia fue educado en un ambiente frío y rígido, quizá y sin quererlo o sin darte cuenta puedas repetir este rol con tus hijos porque es lo que has aprendido. Pero si te das cuenta y quieres cambiar para ser más cálido, podrás hacerlo.
Los adultos tenemos la capacidad de crecer como persona y mejorar aquellos aspectos que no nos parecen adecuados de nuestra personalidad, siempre con paciencia y tesón. Los abrazos tienen muchos beneficios saludables para los niños y es adecuado que lo sepas para empezar a abrazar aún más a tus pequeños de casa.
Beneficios de abrazar a los hijos
Seguridad
Tu hijo sentirá seguridad gracias a estar rodeado por los brazos de sus progenitores. Además de la gran seguridad que transmitirás a tu hijo, también se sentirá acompañado por las personas que más quiere, por sus padres.
Un abrazo es un gesto muy sencillo, pero está cargado con una gran energía emocional que hace que las personas que lo dan y que lo reciban se renueven energéticamente. La comunicación no verbal es mucho más poderosa que la comunicación verbal en una relación de afecto.
Emocionalmente perfecto
La salud emocional debe cuidarse para que la salud general de la persona se vea fortalecida, porque ambas están unidas. Los abrazos son la mejor expresión de amor para padres e hijos ya que de esta manera se puede comunicar su cercanía, su vínculo, su confianza y libertad.
Además, la autoestima de tu hijo se verá incrementada ya que ésta se forja con el día a día. Para que tu hijo tenga un buen amor por sí mismo, en su infancia deberá empezar por el amor recibido por sus progenitores y el entorno más cercano. ¿Por qué? Porque tu hijo empezará a formar su imagen personal dependiendo de la información de él que recibirá de su entorno próximo.
Felicidad en familia
La felicidad en familia se debe cultivar cada día, la alegría de los abrazos deben ser diarios, constantes y sobre todo, sincero. El amor de un abrazo no debe ser negado, jamás.
Seguro que después de leer estas líneas te están entrando ganas de abrazar a tus hijos un poco más cada día… ¡pues de eso se trata! De que esas ganas de dar y recibir abrazos las tengas cada día y lo demuestres practicando los abrazos de amor en casa.
Fuente. vix.com