Países como Suecia pueden decir con orgullo que logran reciclar el 99% de sus desechos. La meta principal es reutilizar esta basura para producir energía.
El Programa WTE “de desecho a energía” es lo que hace posible transformar toda esta cantidad de basura en un beneficio energético. Eso no es todo, Suecia importa 70,000 toneladas de residuos de otros países como Noruega e Inglaterra a sus centros de reciclaje.
Esto es un trabajo en conjunto con la educación de sus habitantes que llevan a cabo 5 actividades:
1. En cada zona residencial, por ley existen estaciones de reciclaje. Cada habitante separa todos los residuos en su casa para finalmente llevarlos a esas estaciones.
2. Los residuos de alimento se convierten en abono para el suelo o biogas. El periódico, plástico, metal, vidrio, focos y baterías son separados independientes a residuos que sí pueden tener un segundo uso como medicamentos, muebles y electrónicos.
3. El 50% de la basura de las casas se quema para producir energía mientras que el otro 50% proviene de residuos industriales y comerciales. Tal incineración da como resultado el calor necesario para 810,000 hogares y electricidad para casi 250,000.
4. Las empresas suecas ponen mucho de su parte como la cadena H&M que recibe ropa usada de sus clientes a cambio de un descuento para comprar nueva.
En cuanto a McDonalds, ellos aceptan botellas de cerveza vacías a cambio de hamburguesas.
5. Los suecos separan la comida en bolsas verdes, papel en bolsas rojas y el vidrio y metal en otras distintas. Una vez en la planta de reciclaje, un sofisticado sistema las ordena automáticamente por color.