Estefanía Esteban
Redactora de GuiaInfantil.com
Lo niños son capaces de ver cosas que los adultos no consiguen ver. De hecho, existen muchos acertijos que sólo niños de cinco y seis años son capaces de resolver en tiempo récord. ¿Sabes por qué sucede esto? El cerebro de los niños funciona de forma diferente al de un adulto. Mientras que ellos tienden a sintetizar y fijarse en cosas obvias y concretas, al ojo del adulto, se le escapa porque tiende a acumular información.
Aquí tienes algunos ejemplos que demuestran que hay acertijos que sólo pueden resolver los niños y te explicamos por qué sucede esto.
El caso extraño de esta imagen que sólo pueden resolver los niños
Fíjate en esta imagen, no más de 20 o 30 segundos. Al cabo de ese tiempo, cierra los ojos y responde a esta pregunta: ¿qué hay de extraño en ella? Un adulto intentará contestar… ‘¿las chicas están demasiado separadas?’… ‘¿Algo que tienen detrás?’…
El problema es que el cerebro de un adulto tiende a acumular información e incluso a añadir cosas donde no las hay. Lo ve todo a nivel global e intenta asimilar más y más información en el menor tiempo posible. De esta forma, no puede centrarse en detalles básicos y elementales. El cerebro de un niño, sin embargo, es capaz de sintetizar y centrarse en una única cosa, aquello que les llama poderosamente la atención porque no ‘le encaja’. En este caso, ¿sabes qué contestaría rápidamente un niño?
¡El banco no tiene la parte donde las chicas deben sentarse! Ellas han posado para crear el efecto óptico de que están sentadas pero en realidad no lo están.
¿Acertaste?
Acertijos que sólo resuelven los niños de primaria
Sea como sea, los niños nos sorprenden, y con sólo cinco o seis años son capaces de resolver acertijos que se escapan a nuestro entendimiento. Otra vez se debe a que tendemos a buscar la ‘complejidad’ de un problema frente a la imposición del sentido común. El cerebro de un niño de primaria simplifica todo y se centra en detalles obvios. Este acertijo, por ejemplo, dio la vuelta al mundo. Lo utilizaron en colegios de China como prueba de acceso a primaria… La pregunta era: ¿en qué plaza ha aparcado el coche?
La respuesta es… ¡87! Los niños se dieron cuenta de que la imagen había que mirarla al revés, tal y como lo vería el conductor del coche que acaba de aparcar. Utilizaron para resolver este problema lo que el psicólogo Edward de Bono llamó ‘pensamiento lateral’, y que usan los niños para resolver problemas que precisan un enfoque creativo. Es decir, se necesita de forma indirecta algo de imaginación, ya que se crean patrones de pensamiento diferente al pensamiento común. Ahora te parece obvio, ¿verdad? Pero… ¿cuánto tardaste en darte cuenta?
¿Resolverías este otro acertijo? De nuevo una pista: son capaces de acertarlo niños de cinco años. La pregunta es… ¿Cuánto es ‘x’?
8809 = 6
7111 = 0
2172 = 0
6666 = 4
1111 = 0
3213 = 0
7662 = 2
9312 = 1
0000 = 4
2222 = 0
3333 = 0
5555 = 0
8193 = 3
8096 = 5
7777 = 0
9999 = 4
7756 = 1
6855 = 3
9881 = 5
2581 = X
Un niño de cinco años no es capaz de hacer ecuaciones numéricas. Él se fija en el dibujo. Entonces le llama poderosamente la atención una cosa: los círculos. Cada cifra tiene una serie de círculos. Por ejemplo, para un niño de cinco años, el 8 tiene dos círculos. El resultado de cada cifra es el número de círculos que tiene la cifra completa. Por eso 7777 es 0. ¡No tiene ningún círculo! Mientras que 8193 es igual a 3, ya que tiene tres círculos. El resultado de ‘x’ por lo tanto es… ¡2!
¡Increíble!