Cristina Arroyo Fernández
Definimos la dicción como el uso que hacemos de las palabras para formar frases, tanto de forma oral como escrita, es decir, la forma de expresarse que tiene una persona.
Hay niños que tienen ciertos problemas de dicción, les cuesta pronunciar algunas palabras. Los padres podemos ayudarles a mejorar su dicción. Pero, ¿qué ejercicios podemos realizar para mejorar este aspecto? En Guiainfantil.com te lo contamos.
Actividades para que los niños tengan una buena dicción:
– Respiración: Es importante adquirir un patrón respiratorio diafragmático adecuado. De esta manera, el niño aprenderá a dosificar su aire en función de aquello que queremos decir en cada momento.
– Lectura de trabalenguas: De esta manera, el niño ganará agilidad articulatoria, lo que mejorará la inteligibilidad de su habla.
– Lectura de poesía: La lectura de poesía o teatro ayuda al niño a vocalizar, modular su voz y articular claramente los diferentes fonemas.
– Lectura en voz alta: Es muy importante para trabajar la dicción, y ayudará al niño a ejercitarla.
– Lectura sobre articulada: Es una técnica que permite al niño adquirir una buena pronunciación de cada fonema.
– Ejercicio del lápiz: Coloque un lápiz o un depresor entre los dientes del niño y pídele que lea en voz alta. De esta manera, su lengua y sus músculos faciales deben esforzarse más para obtener una mejor dicción. Se puede hacer también improvisando una conversación.
– Lenguaje corporal: El lenguaje no verbal es igual de importante que el lenguaje verbal a la hora de transmitir un mensaje. Por ello, a pesar de trabajar el lenguaje oral, es importante no olvidar nunca este aspecto.
Estos son algunos de los ejemplos de ejercicios que se pueden realizar. Debemos enfocarlo siempre de forma lúdica, y animar al niño reforzando sus progresos. En caso de que necesite ayuda, ¡no dude en contactar con su logopeda!
La autora es logopeda
Fuente: guiainfantil.com