Siguenos:

Biografía de Salomé Ureña de Henríquez

Salomé Ureña de Henríquez

[av_image src=’http://planlea.listindiario.com/wp-content/uploads/2016/10/68076D90-319B-4243-83A9-FEFFC5887D34.jpg__680__460__CROPz0x680y460-215×300.jpeg’ attachment=’4539′ attachment_size=’medium’ align=’right’ styling=” hover=” link=” target=” caption=” font_size=” appearance=” overlay_opacity=’0.4′ overlay_color=’#000000′ overlay_text_color=’#ffffff’ animation=’no-animation’ custom_class=” av_uid=’av-229a2e’][/av_image]

(Nombre de nacimiento Salomé Ureña Díaz; 21 de octubre de 1850 – 6 de marzo de 1897) fue una reverenciada poetisa y educadora dominicana, siendo una de las figuras centrales de la poesía lírica del siglo XIX e innovadora de la educación femenina en su país.

Alumna aventajada de Eugenio María de Hostos, sus obras se centran en el amor a la patria y en su entorno familiar. Aunque no escribía muy a menudo, logró llamar la atención de gran parte de Latinoamérica por la profundidad de sus obras. Entre sus trabajos más notables se encuentran: A La PatriaEl Ave y El Nido, Sombras, entre otros.

BIOGRAFIA

Ureña nació en Santo Domingo, República Dominicana el 21 de octubre de 1850. Era hija del abogado y también escritor Nicolás Ureña de Mendoza y Gregoria Díaz de León, quien dio a su hija sus primeras lecciones educativas. A temprana edad, Salomé fue influenciada también por la literatura. Su padre le enseñó las obras clásicas de autores españoles y franceses que ayudaron a la joven Salomé a desarrollar su propia carrera.

Comenzó a escribir sus versos a los quince años de edad, publicando posteriormente sus primeras obras a la edad de diecisiete años y haciéndose conocida por su espontaneidad y ternura. En 1867 publicó sus primeras obras bajo el seudónimo «Herminia», nombre que usó hasta 1874. Mientras iba pasando el tiempo se volvía más trágica y triste con poemas como En horas de angustia o muy patriótica y fuerte en poemas como A La Patria y Ruinas. En los años posteriores incluiría temas de su propia vida en sus poesías, como se puede ver en Mi Pedro (dedicada a su hijo, tal vez su poema más cariñoso), La llegada del invierno, y un libro que se hizo muy popular llamado Esteban, donde habla de su país, su familia, las plantas y flores, y de la propia isla.

INSTITUTO DE SEÑORITAS

Alrededor de 1881, Salomé fue animada por su marido para abrir el primer centro de educación superior para mujeres jóvenes en la República Dominicana, lo cual hizo el 3 de noviembre de ese año bajo el nombre de «Instituto de Señoritas». En los próximos cinco años, las primeras seis mujeres se graduaron de maestras en el Instituto, algo poco común en ese momento. Años después de su muerte, el instituto fue bautizado con su nombre.

VIDA PERSONAL

El 11 de febrero de 1880, a la edad de veintinueve años, se casó con el doctor Francisco Henríquez y Carvajal (más tarde presidente de la República Dominicana), quien también fue escritor, y una figura importante en la política.1 Tuvo cuatro hijos con él: Francisco, Pedro, Max y Camila. Sus hijos más tarde se convertirían en figuras altamente respetadas de la literatura contemporánea de mediados y finales del siglo XX como escritores, filósofos, poetas, humanistas y críticos de arte.

MUERTE Y LEGADO

Ureña murió debido a complicaciones de tuberculosis en 1897, a la edad de 46 años. Fue enterrada en la iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes y trasladada en 1972 al Panteón de la Patria.

Es considerada por muchos como la escritora más excelsa de la República Dominicana; inyectaba profundos sentimientos en cada uno de sus poemas. Salomé no fue solo una prominente escritora y educadora dominicana, sino también una gran luchadora por la igualdad de derechos entre mujeres y hombres. Su lucha la convirtió en una mártir en su país y es recordada por su arduo trabajo en favor de la educación femenina.

Acerca de ella se ha escrito mucho y sus poemas forman parte del patrimonio literario dominicano.

OBRAS

Sus obras poéticas, cerca de sesenta composiciones, incluyen la épica y la lírica, entre las que se encuentran:

1873 – La gloria del progreso

1876 – Ruinas

1877 – La llegada del invierno

1878 – La fe en el porvenir

1880 – Anacaona

1880 – Poesía de Salomé Ureña de Henríquez

1881 – Sombras

1897 – Mi Pedro

 

Últimas noticias:

Suscribete a nuestro NewsLetter y recibe las notificaciones de todo nuestro contenido actualizado.