Los trabalenguas son bastante lúdicos y muy eficientes para mejorar la pronunciación, la producción fonética y la vocalización.
Selecciona o inventa algunos trabalenguas divertidos. Pueden estar vinculados con los temas que se desarrollan en la unidad didáctica.
Presenta los trabalenguas en un papelógrafo o escritos en la pizarra.
Recuérdales que, para que hablen mejor y que los demás escuchen bien, deben sentarse derechos, con sus pies apoyados en el suelo, y su cabeza y su voz orientada hacia el frente.
Lee el trabalenguas señalando cada palabra en el texto.
Invita a que lean contigo el trabalenguas, siguiendo las palabras mientras las señalas.
Una vez que ya lo sepan, invítalos a que lo hagan cada vez más rápido, sin equivocarse.
Con trabalenguas destrabo mi lengua, mi lengua destrabo con trabalenguas.
¿Cuántos cuentos cuentas cuando cuentas cuentos?
Cuando cuento cuentos no cuento cuántos cuentos cuento.
Perejil comí, perejil cené. ¿Cuándo me desperejilaré?
Pancha plancha con cuatro planchas. ¿Con cuántas planchas plancha Pancha?
Pablito clavó un clavito, un clavito clavó Pablito.
¿Cómo como coco cuando coco como? Como poco coco cuando coco como.
Paco pica poco coco. Poco coco pica Paco.
El libro me quiere hacer libre, del libro no me quiero librar yo.
Paso a paso con su peso, en el piso del pozo puso su paso.
¿Silbas como silba Silvia Silva?
Si silbas como silba Silvia Silva, Silvia Silva silbará.