Cindy Adriana Morales
Cuando se tienen hijos muy pequeños, viajar puede ser una pesadilla. Aquí los consejos esenciales para lograr que se convierta en todo lo contrario, y refutar a todos aquellos que piensan que con niños lo bueno se acaba.
Diversión para todos
Debes encontrar un punto medio para no agotarte o aburrirlos. Opta por hoteles todo incluido de buena calidad. Estos últimos, además de garantizarte alimentos para todos los gustos, ofrecen descanso y diversión sin que tengas que preocuparte por la seguridad de los niños.
Motívalos
Si el trayecto es largo o hay demasiada gente en las filas, platica y muéstrales fotos del lugar que están a punto de conocer. La emoción será tanta que esos momentos de espera los convertirá en personas pacientes. Si aún son bebés, consigue accesorios cómodos y prácticos para cargarlos, como los fulares y mei tai, que son fantásticos y además de ergonómicos te permiten tener las manos libres.
Fuente: National Geographic en Español